Cuidado con el argumento de la desobediencia.

En el cruce de debates sobre la insumisión de las instituciones catalanas en el que estamos estos días con dedicación casi exclusiva, es fácil que en un momento dado surja el argumento de la desobediencia civil: cuando una ley injusta no puede cambiarse por los cauces normales, puede y quizás debe desobedecerse. Así, como Cataluña no encuentra respuesta a una reivindicación que por muchos (me incluyo) se considera justa, como es que puedan decidir democráticamente si quieren o no dejar de ser España, "no tienen más remedio" que optar por la vía de hecho y por tanto, invocar ante ellos el "principio de legalidad" es enrocarse en un búnker y encerrar toda la complejidad de la realidad en el ámbito estrecho de la ley.

Cuidado. En ese argumento hay algunas trampas, y conviene tenerlas presentes antes de entregarse al mismo.

Imaginemos que en España un grupo de notables políticos, alcaldes, militares, periodistas, financieros, empresarios, profesores, etc. han llegado a la conclusión de que el Estado de las autonomías que consagra la Constitución fue un error impuesto por el chantaje de los nacionalistas en un momento en que era necesario un amplio consenso, es injusto y supone graves inconvenientes para la competitividad, para la dirección de políticas ambiciosas, para el crecimiento económico y para la solidaridad entre los ciudadanos. Elaboran un discurso fuerte, y lo van presentando a los ciudadanos. Propugnan su supresión. Hacen mociones, presentan iniciativas, incluso pretenden en alguna ocasión una reforma constitucional en ese sentido. Pero comprueban que sus aspiraciones chocan con las importantes dificultades para reformar la Constitución, que en síntesis requieren un consenso muy generalizado entre todos los españoles, incluidos obviamente los catalanes, vascos, gallegos y andaluces. En ese contexto, y puesto que están convencidos (algún sondeo podrían esgrimir) de que una mayoría de españoles podría estar por la labor, reclaman la celebración inmediata de un referéndum sobre ese punto. El Gobierno, imaginemos que sostenido por grupos catalanes y vascos partidarios de más autonomía, no autoriza la celebración de ese referéndum, porque nada le obliga a autorizarlo. Se niega a convocarlo y remite a los procedimientos de reforma constitucional. Crece la presión, invocándose el argumento democrático, pero el caso es que la mayoría parlamentaria de ese momento toma la decisión política de impedir ese referéndum. Y el grupo de "notables" anti-autonomías llama a la desobediencia. Cuentan, incluso, con un importante sector del Ejército que se muestra proclive: no parece que se trate de pura ficción. Cuentan con el apoyo de grupos empresariales y financieros, con partidos emergentes, con poderosos medios de comunicación, y organizan grandes manifestaciones en toda España reclamando la supresión de las autonomías. Finalmente, se reúnen en cualquier lugar emblemático y llaman a la población a votar. Algunos presidentes de comunidades autónomas y muchos alcaldes secundan la propuesta, invocando su carácter democrático, y dictan decretos y órdenes de convocatoria del referéndum en sus territorios. El Gobierno logra la nulidad de esas convocatorias por resolución del Tribunal Constitucional, pero la votación se produce, de hecho, en no pocos lugares. Al día siguiente, tras el cómputo de las papeletas que efectivamente se hayan introducido en las urnas donde haya sido posible, la Junta de promotores del referéndum proclama la disolución de todos los parlamentos y gobiernos autonómicos y los sustituye por Delegados de esa Junta de promotores y Juntas vecinales elegidas en asambleas. La cosa va a más, el Gobierno intenta reprimir los actos de ejecución de esa "proclamación", y la Junta de promotores finalmente da un golpe de Estado y promueve la redacción de una nueva Constitución sin autonomías: en vez de comunidades autónomas, gobernadores civiles en cada provincia.

La desobediencia, claro que sí, abre caminos. Pero el territorio que inaugura no sólo sería utilizado para bondades universales, como suprimir la esclavitud, permitir el voto a la mujer o incrementar la ayuda al desarrollo. Es fundamental recordar que históricamente el principio de legalidad es un límite para el ejercicio del poder: las autoridades (presidentes, alcaldes, jueces, funcionarios) no pueden anteponer su moral o sus objetivos políticos a la ley que ha sido elaborada por los representantes designados en elecciones. Claro que sí, la ley no es necesariamente justa, y a veces blinda privilegios. Pero si queremos suprimir lo que consideramos injusto con la desobediencia, hemos de saber que entonces no hay defensas frente a quienes defienden "justicias" que nos horroricen. Los caudillos siempre creen que interpretan (y algunos que encarnan) lo justo y la voluntad popular (o "nacional"), y esgrimen esa justificación para derribar los obstáculos legales por la vía de hecho. Y sin las cercas del principio de legalidad, dentro de las cuales hay victorias y derrotas, frustraciones y logros, ganadores y víctimas (¿sí o no?), nos quedamos sólo con las voluntades. Y entonces, ya se sabe: gana el más fuerte, es decir, el que tiene más dinero, más armas o más medios para imponer su voluntad, por supuesto justa.

¿Es legítimo desobedecer una ley o un sistema injusto? Lo sea o no, nadie puede impedirla cuando hay ciudadanos y grupos decididos a hacer prevalecer su voluntad o su sentido de lo "bueno" frente a la ley. Pero bueno sería entender que el principio de obedicencia (sobre todo de las autoridades) a la ley no es un enojoso recurso del poder contra los débiles, sino (también) una garantía, un dique frente al poder (público y privado). Que las autoridades y el ejército mismo estén sujetos a la ley es una gran conquista histórica. Por lo que ensalzar la desobediencia y afear el respeto a la ley nos puede dejar en la intemperie. Por eso las sociedades avanzadas, absolutamente todas, están organizadas desde el principio de legalidad (democrática). No seamos ingenuos: no es porque en esas sociedades se piense que la ley es intrínsecamente buena y justa. Es porque la alternativa es un desastre. Cuando se rompe la baraja oficial aparecen las cartas en la manga.

12 Respuestas

  1. Estimado Miguel, en mi opinión, tu texto es un bello canto gregoriano al orden divino de un concepto de Ley que se funda en el paradigma cristiano del pastor y sus ovejas.

    En tu texto subyace la idea del pueblo engañado por unos perversos capitostes que lideran una desobediencia “falsamente popular” con la magia del flautista que concentra a las ratas de la cuidad para llevarlas donde convenga. El pastor o el caos, ese es el dilema, señalas….

    El buenismo de tu discurso contrasta con las trampas que no desvelas en él….

    ¿O acaso pretendes convencernos de que tu discurso no tiene trampas?…

    En mi opinión la primera trampa de tu narrativa es formular el principio de la legalidad como «un límite para el ejercicio del poder», cuando tu bien sabes que es su principal instrumento para justificar su supuesta legitimidad…

    Sabes bien que el «delito» es un constructo del derecho penal y que la «culpa» no es una cuestión de hecho, sino un concepto legal de perpetración de un acto prohibido.

    Es la prohibición de votar lo que aquí y ahora solivianta a decenas de miles de ciudadanos en Cataluña y en España (tu mismo te incluyes en el grupo)

    Y esa prohibición no tiene nada que ver ni con el principio de legalidad, ni con la Constitución ya que es una prohibición de naturaleza política; de conveniencia política.

    De hecho nunca podrás señalar ninguna Ley, ni artículo de la Constitución que prohiba opinar.

    Otra cosa es que el poder político y judicial construyan una arquitectura de analogías, proyecciones y conjuros que conviertan la opinión en un asunto prohibido extramuros del texto legal.

    De hecho tu artículo sería considerado como una completa aberración irracional en el contexto del referendum de Escocia en 2014. El racionalismo inglés no concibe el principio de legalidad como el privilegio absoluto de un poder ejecutivo o judicial frente al “poder que emana del pueblo”, y tiene bien cuidado de separar un problema político de un problema jurídico.

    Distinción que lamentablemente parece que no se practica ni en Madrid, ni en Granada.

    Buenas Noches

    • No, no es cierto. Durante mucho tiempo Escocia quiso un referéndum y no lo tuvo, porque quien tenía competencia para autorizarlo no lo quiso. La ley no sólo contiene mandatos: también atribuye competencias. Autoatribuirse competencias fuera del marco

      • (tecla involuntaria; sigo). “…fuera del marco que te da las que tienes, es un fraude. La autoridad que se extralimita no puede luego exigir obediencia. Por eso no es tan irrazonable admitir el margen de frustración, de injusticia, y de abuso de poder que conlleva el poder de legalidad cuando la ley es instrumento de dominio, como contrapartida a defender ciertos territorios (de derechos, de seguridad jurídica, etc.) que sólo tienen esa garantía, porque amplias capas de la población no tienen más que eso. ¿Se puede elegir, de entre dos males, el mal menor? ¿Se equivoca todo el mundo? ¿Conoces un país (no me vale Gran Bretaña en absoluto) en el que las leyes tengan una cláusula tácita según la cual cuando sean injustas deben desobedecerse? Y, ¿conoces algún país en el que todas las leyes sean justas e impecables? A ver si el gregoriano vas a ser tú: no, el valor de la ley no está en que sea divina y perfecta.

  2. ¿Qué no es cierto… Miguel?

    No hay cosa que más pánico me de que un magistrado hablando de certezas… para un socrático patológico como yo es como hablar con un extraterrestre mutante… Aunque que te equivoques de teclas es un punto a tu favor ya que delata cierto rasgo de la humanidad clásica…

    ¿Qué no es cierto… Miguel?

    Si mal no recuerdo hubo referendum ¿no?… Consecuentemente cambió la “voluntad” del “competente” ¿no?… y este –tan relevante para ti–, cambio de “querer” (voluntad) que fue estocástico, revelación divina, o porque tenía una pistola en la espalda?

    Cada vez me resulta más difícil diferenciar tu argumentario aparentemente racionalista del “ratio decidendi” de un teólogo de la diosa de los platillos y los ojos vendados… La Ley es TODO, dices; es el marco!… y fuera del marco… ¿qué hay?… Miguel… ¿Pipas, altramuces y cocacolas…?

    Planteas lo que Mario Bunge denominó en su día como “caja negra” solo que bunquerizada, sin inputs ni outputs…

    Luego dices algo de marco ( pa ponerle marco, digo); “La autoridad que se extralimita no puede luego exigir obediencia.”

    Entiendo que hablas de Puigdemont y compañía… Y el millón y medio de paisanos de Sant Jordi ¿qué son?… ¿ranas del campo?

    No te equivocas de tecla… sino que, más bien, tus gafas delatan un problema de enfoque

    Sigues en el cuento del pastor y las ovejítas, solo que ahora el cuento tiene “holguras” y hablas de “márgenes” de “frustración, injusticia y abuso de poder”… y de «la ley como instrumento de dominio»… ¡Interesante concepto!

    Confieso que no conozco ninguna Ley que no sea instrumento de dominio… ¿Podrías concretar alguna que no lo fuese?

    La Ley como concepto de convivencia armónica la trituraron los romanos tras la batalla de Corinto allá por el 146 a.C. cuando convirtieron Grecia en protectorado Romano… A partir de ahí el derecho romano no era otra cosa que el instrumento de dominio por excelencia…

    ¿De qué garantías hablas?… y ¿de qué capas de la población hablas?

    Tu retórica es tan trilera que conmueve que uses vasos tan translucidos…

    Primero hablas de “autoridades que se salen del marco” y luego preguntas si se equivoca todo el mundo… ¿De qué mundo hablas ahora; del de las autoridades y sus cocteles o del de las ovejitas de peluche trabajadoras?

    ¿Por qué no te vale Gran Bretaña?

    Qué poco conoces Miguel tu misma Ley; la Española que todos los días aplicas… o acaso los artículos 446 y 447 del Código penal Español no son cláusulas que condenan la injusticia de la prevaricación judicial y administrativa…

    ¿Conoces tu algún país en que no se prescriba la prevaricación?

    Todos los paises dicen que tienen leyes justas e impecables; incluso la España de Franco lo decía y lo sigue diciendo…

    ¿Conoces tu algún pais que no diga que sus leyes son justas e impecables?…

    Mejor que no sea yo el “gregoriano” porque canto fatal Miguel!!!

    Nunca me oiras –y menos me leerás–, decir a mi nada sobre el valor de la Ley como divina o perfecta… Yo detesto abiertamente el derecho de sometimiento romano y abogo por el viejo concepto socrático de la Ley como derecho armónico de convivencia…

    Ya se que te suena a Chino… pero no olvides que los Chinos existen… y que son muchos…

    ¡¡¡Una Jartá!!!

    La soberanía ya la tienes con tu toga… pero la Razón te la ties que ganá a pulso…!!!

    Ahí me encontrarás con lealtad porque busco conocimiento, no dominio… esa es la gran fuerza epistemológica de la duda!!!

    Buen fin de semana

  3. Queridas marujatrises, podemeros, yihadienses todos mios de mi corasón y de mis sentrañas, dos puntos si a continuasión seguido:
    Dise Miguel que está de acuerdo con la “reivindicación” del pueblo catalán que quiere “decidir democráticamente dejar de ser España” Oy Oy Oy Oy Miguel dinos coómo se puede materialisar practicademente esa reivindicasión porque yo reivindicasiono ya Sanlúcar de Barrameda rey mio y me encantaría una epidemia reivindicasional en toda España en los prósimos saños: qué lujuria rey¡¡
    Ya me conoseis y sabeis que soy una mujer proteica omincomprendensiva y heterodoxiente, pero hay cosas que no admito rasionaldemente junquereros, yo admito una crisis musulmaniense una podemasión una corrupsión ética no delistual compañeros si compañeras, pero no admito las abstracciones reivindicasionales ni la deflación podemeros mios ¡¡ la deflación ¡¡ por dios marus resulta que la inflación es mala pero también es mala la deflación que te baja los presios pero te congela el salario y te quedas salelá y no se mueve la economía y to estancao con to la leshe que mamaron marus los capitalistas sestos asquerosos nos tienen engañadas marus estabas tu honrá acabando la plansha y te desias sa ti misma qué bien ya cae la inflación y la burbuja y resurta que pa qué? en? ná marus pa ná mentira tó que macuerdo de los siclos seconómicos de Leontief que estudié yo en la Academia de costura y ná marus los hombres son unos mentirosos y entonses macuerdo de una poetisa nasida en Barselona que se llamaba Margarita Hickey (1753-1793) que le desía a las samigas:
    ” Guarda, deidad peregrina,
    entre tantas perfecciones,
    las gloriosas excepciones
    que te acreditan divina:
    a nadie tu fe destina,
    conserva libre tu mano,
    huye del lazo inhumano,
    que el amante más rendido
    es, transformado en marido,
    un insufrible tirano. “

    Pero Miguel por dios ya una reivindicasión ???

    Queridas marujatrises, podemeros, yihadienses todos mios de mi corasón y de mis sentrañas, dos puntos si a continuasión seguido:
    Dise Miguel que está de acuerdo con la “reivindicación” del pueblo catalán que quiere “decidir democráticamente dejar de ser España” Oy Oy Oy Oy Miguel dinos coómo se puede materialisar practicademente esa reivindicasión porque yo reivindicasiono ya Sanlúcar de Barrameda rey mio y me encantaría una epidemia reivindicasional en toda España en los prósimos saños: qué lujuria rey¡¡
    Ya me conoseis y sabeis que soy una mujer proteica omincomprendensiva y heterodoxiente, pero hay cosas que no admito rasionaldemente junquereros, yo admito una crisis musulmaniense una podemasión una corrupsión ética no delistual compañeros si compañeras, pero no admito las abstracciones reivindicasionales ni la deflación podemeros mios ¡¡ la deflación ¡¡ por dios marus resulta que la inflación es mala pero también es mala la deflación que te baja los presios pero te congela el salario y te quedas salelá y no se mueve la economía y to estancao con to la leshe que mamaron marus los capitalistas sestos asquerosos nos tienen engañadas marus estabas tu honrá acabando la plansha y te desias sa ti misma qué bien ya cae la inflación y la burbuja y resurta que pa qué? en? ná marus pa ná mentira tó que macuerdo de los siclos seconómicos de Leontief que estudié yo en la Academia de costura y ná marus los hombres son unos mentirosos y entonses macuerdo de una poetisa nasida en Barselona que se llamaba Margarita Hickey (1753-1793) que le desía a las samigas:
    ” Guarda, deidad peregrina,
    entre tantas perfecciones,
    las gloriosas excepciones
    que te acreditan divina:
    a nadie tu fe destina,
    conserva libre tu mano,
    huye del lazo inhumano,
    que el amante más rendido
    es, transformado en marido,
    un insufrible tirano. “

    Pero Miguel por dios ya una reivindicasión ???

  4. perdon por el duplicao

  5. No pareces capaz de escapar de tu pellejo de juez.Y encima los demás no es que ayudemos al fin y al cabo pensamos que eres juez y nada menos que del tsja.
    Pero conmigo es distinto ( excepto por tu pasión de no permitir asomarse.
    Yo pienso que como juez en un blog es porque yo lo valgo.
    Naturalmente si fuera solo eso no estaríamos aquí.
    Eres una de las mentes mas poderosas que he visto nunca a partir de tus comentarios y opiniones se ve la realidad se puede percibir la estructura de la vida. Solo hubieras sido mas hermoso siendo mujer porque tu lo vales,falacias como la actitud del machismo de tu artículo no pueden ser mas explicitas y llevarnos a la realidad como un farol diogesiano.
    Que importa de lado que estés si en temas delicados siempre se ve la realidad,que naturalmente ignoras ya que lo tuyo es la ley matemática aplicada pura.
    Y todo porque tu lo vales.No es mala postura acaso los físicos no necesitan de estructuras que cierren conceptos? Porque ibas a ser menos.
    Y mi me encanta que detrás de tu poderosa mente se vea el río de la vida que naturalmente ignoras como especialista.
    Tenía razón Froid cuando afirmaba Están locos estos romanos refiriéndose a las profesiones especializadas ?

  6. Vaya.. amores
    Has traspasado todas todas las reglas? Hacia un Miguel en el bar de plaza podemos.
    No me bóvedas a leer mas pero yo a ti si.
    Sigue con las falacias no sabes lo útiles que son.
    Adiós no básico un placer,pero se podía esperar algo mas.
    Sigue bebiendo con conshi

    • Que horrible corrector y no puedo prescindir de el veré la forma de quitármelo de encima ,Adiós juez no ha sido un placer.

  7. Amigos, prueba de que valoro mucho vuestros comentarios es que cada dos días, más o menos, dedico un buen rato a “salvarlos” de los doscientos comentarios spam que me entran con anuncios de viagra, ofertas de préstamos y hasta de compras de riñón. Tengo que revisarlos todos y marcar los vuestros antes de dar a la tecla “eliminar” (espero que no se me haya pasado alguno).
    Aramis, yo no sé si mis argumentos son como los de los teólogos, son a los que llego. Los expongo intentando marcar énfasis en lo que considero “confusiones”, como hace todo el mundo. Y como haces tú. Cada uno con su estilo. Aunque (no siempre), muchas veces tengo la impresión creo que contestas a otros. Al menos no me reconozco en la mayoría de opiniones y argumentos que me endosas como míos. No descarto que se trate del efecto de verlo todo con unas solas gafas, aunque hago lo posible porque no sea así. Pero si yo digo que hay que tener cuidado con el argumento de la desobediencia, porque puede ser invocado para eliminar lo poco que tenemos conquistado, y si digo que el valor del principio de legalidad no es la felicidad, justicia e igualdad que propicia, sino sólo el de un mal menor, pues no estoy diciendo que la ley sea todo, ni divina, ni gregoriana.

    Conshi, el argumento “Sanlúcar de Barrameda” (o Tarragona, o Valle de Arán) como enmienda a un derecho constitucionalizado de autodeterminación no tiene recorrido. Tenemos un ejemplo muy cercano, que no es Escocia ni Checoslovaquia ni Canadá: es España. En el artículo 151 de la constitución hay regulado un derecho de autodeterminación (un cauce de expresión a los residentes de un territorio que pueden proponer un margen de autonomía mayor o menor), y el argumento Sanlúcar está muy bien resuelto. Es una autodeterminación limitada (debe respetar el marco de competencias exclusivas del Estado), pero es autodeterminación, y prevé la formación de una voluntad “territorial” dentro de España (y por tanto un sujeto político) cuando sea “mayoritariamente homogéneo” y “territorialmente significativo”.

  8. Jajaja…coincidimos Miguel… yo también tengo la impresión de que contestas a otros… y agradezco que separes los spames de las “pastillas” y sobre todo de la viagra… gran tino ese en este clima de recalentamiento continuo…

    Veo tambien que conoces lo que hace todo el mundo y te agradezco que me incluyas en el planeta que conoces, aunque reconozco que a mi nadie me ha ofertado negocio alguno de riñones con lo que me divierte sobre manera que te los oferten a ti…tal y como esta la justicia no me extraña nada…el trafico de riñones. .. (broma irremediable)…

    Ya se, al menos, que si desaparece Aramis de tu blog es que ha sido por exceso de viagra o de riñones. Reconozco que semejante destino nunca me lo hubiese imaginado desde tu balcón peligroso… hay peligros y peligros, y yo siempre he soñado con un destino honorable para Aramis, pero este que desvelas me produce desasosiego. ..

    Entiendo que no me entiendas, pero por mucho que me repitas tu posición doctrinal bajo fórmulas diversas de avisos, confusiones, etc. El problema de la comunicación no se limita a la promulgación de autos y sentencias, sino que abarca la dialectica Emisor-receptor y viceversa en iguadad de planos.

    No es solo una cuestión de gafas.

    Principalmente es una cuestión de curiosidad como bien estableció John Rawls…

    Por cierto ¿ a cuanto esta el riñón?

  9. Pues a mi solo me llega esto: https://youtu.be/AS77q2lgYkY

Deja tu comentario

Los comentarios dan vida al texto y lo pone en movimiento.